Trata de entender el mundo de principio a fin, y sigue la estela de los modelos que nos han de servir de genuinos ejemplos.
No
malgastemos los tiempos de otras etapas en las que fuimos parte hacia
ese afán en el que aprendimos mucho. Por ahí seguiremos.
Nos
hemos de convencer de una retórica con la que nos prepararemos para ser
en la misma noche de varios tiempos considerados desde implicaciones
variadas.
No vivamos en la nada que ahoga. La soledad ha de ser consentida y no provocada por un destino que no acatamos.
Anhelemos los aires de una juventud alada. Nos debemos a los universos con los que viajamos hacia la novedad misma.
Juan TOMÁS FRUTOS.
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